Desde entonces no volví a ser la misma.

Es como prescindir de aquello que tanto necesitas, pasé de decir 'cuídate' a 'por favor, ven a cuidarme'.
Hasta las tantas y hasta las trancas por un 'hola', habláis de lo que sufro o he podido llegar a sufrir por un par de besos o un par de palabras, y habláis sin saber porque hoy moriria por un par de uno de los anteriores.
Apostaría todas mis cartas por un amanecer y no a tu lado, que contigo sí. Y no digo a tu lado porque no incluye tus manías.
Yo sigo sentada dónde prometí seguir hasta que alguien volviera a levantarme, pero esta vez la ocasión merece una reverencia, un 'Gracias, vida' a cambio de un 'Alímentate de ilusiones, el pasado nunca vuelve', pero a mi me basta.
Y es que a lo mejor es verdad que el pasado nunca vuelve, y que nada podría llegar a ser como antes, pero vuelvo a repetir, con esto, que para tantos es poco, para mi significa una parte de mi vida.